Si existe una receta que a mí me vuelva loco de la gastronomía peruana y que no dejaría de comer es sin duda el lomo saltado.
Una receta que yo considero que podría ser casi de aprovechamiento, ya que a la Carne, para estirarla, se le añade cebolla, tomate, patatas fritas, de tal forma que con unos pequeños pedazos de carne podamos hacer un plato exquisito y excepcional.
En YouTube podréis ver infinidad de recetas hechas en sartén en un fuego doméstico, pero no hay absolutamente nada que se parezca a un lomo saltado hecho al Wok, con la potencia calórica que nos puede generar el carbón de nuestro Kamado a máxima potencia
Si usas tu Kamado existe un soporte específico para el Kamado Joe que por supuesto se puede adaptar a nuestro Kamado Masterbuilt, que nos permitirá que si necesitas soltar el Wok este se sugete perfectamente. receta de + tip
estos son los ingredientes para la receta de Lomo saltado en Wok al kamado:
1kg de lomo de baca.
6 dientes de ajo
3 cebollas moradas
 dos ajíes amarillos.
3 a 4 tomates rojos grandes.
Aceite de oliva.
3 a 4 patatas. Vinagre de manzana.
Salsa de soja.
Comino
Pimienta negra recién molida.

Cómo hacer auténtico lomo saltado al Kamado:
Cargamos de carbón nuestro Kamado, y lo llevamos aproximadamente a 300 °C.
mientras tanto: cortamos en cubos de mínimo 2,5 × 2,5 cm el lomo y lo aderezamos con el comino, la sal, y la pimienta.
Cortamos la cebolla morada en pedazos de un bocado.
picamos finamente el ajo y despepitamos y desbenamos los ajíes y los cortamos en tiritas finas.
Troceamos los tomates en un tamaño igual o ligeramente inferior al de la carne.

 aprovechamos también a pelar y cortar las patatas, y freírlas, este paso puede hacerse en una cocina convencional, o aprovechar el calor del Kamado para poner nuestra sartén y freír las patatas.
Instalamos el soporte para wok, y ponemos el wok a calentar.
Echamos un chorro de aceite generoso y echamos un pellizco de los ajos finamente picados, removiendo constantemente para que no se quemen.
En cuanto los ajos empiecen a tener color echamos un puñado de carne, consiste en no sobrecargar el Wok para que todos los ingredientes se hagan de forma correcta aunque haya que cocinar por tandas.
Consiste en que la carne se selle por fuera y quede poco hecha por dentro ya que mientras se van cocinando el resto de ingredientes, quedará perfectamente hecha con una textura tierna y jugosa por dentro.
Es el momento de añadir también un puñado de cebolla sin dejar de mover el wok en ningún momento.
Cuando veáis que empieza a tomar un poco de color o huela a cebolla cocinada, añadir el tomate troceado y unas tiritas de ají amarillo.
En este momento los tomates empezarán a soltar sus jugos y es entonces cuando debemos echar un chorro generoso de salsa de soja, mezclar todo bien durante unos segundos, y sacar a un plato para disfrutar de este maravilloso manjar juntándolo con las patatas fritas, y si os apetece, también con un arroz blanco que os ayudará a disfrutar todos los jugos.

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